miércoles, 8 de diciembre de 2010

lector




Hoy ha sucedido algo de verdad emocionante, uno de esos pasos. 
Argemí terminó la tercera novela del Pepé Levalián e imprimió el original para ir leyéndoselo a Lucas por las noches. 
Después del capítulo de esta noche, el niño le ha pedido los folios.
¿Puedo seguir un rato?
Ahora está tirado en el suelo de su cuarto, completamente absorto.
Mamá, lo siento, no puedo parar. No voy a parar.
Son unos folios sin encuadernar, sin ilustraciones, secos y duros paridos de impresora casera.
Y se niega a parar. Ese paso, esa enorme zancada lectora. 

jueves, 25 de noviembre de 2010

perdido Lucas



Ayer no pudimos leer porque Lucas se perdió. Él no pasó miedo. Yo pasé miedo al cabo de un rato, pero poco miedo y todo él por culpa de Dennis Lehane.
Llamé a la Guardia Urbana de Barcelona, que lo encontró y lo llevó a una comisaría de las Ramblas en la que yo he estado por razones muy distintas y a horas menos recomendables.
Volvió a casa cabizbajo y enfurruñado, blandiendo una versión de los hechos que le beneficiaba y en la que tenía parte de razón.
De todas formas, dio por hecho que no habría lectura. Creo que eso ya está entre las peores cosas que le pueden pasar, que no leamos por la noche, no leer.

martes, 23 de noviembre de 2010

esos indios...



Vamos encontrándonos poco a poco con Fogg y su India. Esa India donde lo único bueno es lo que huele a inglés molesta a Lucas un poco y a mí me desconcierta.
En fin, hemos salvado a una princesa y le hemos regalado un elefante a un pobre. Poco a poco Verne nos cuenta que un paisaje tan bello no merece unos pobladores tan bárbaros y crueles y drogadictos -merece capítulo aparte lo del opio y el cáñamo- y que los ingleses no pueden con ellos, pero menos mal que sí con algunos.

viernes, 12 de noviembre de 2010

Niño frente al poeta






Definitivamente, nos gusta más Lorca. Hemos entrado por fin en La vuelta al mundo, pero Lorca es otra cosa. 
Leemos durante la cena la Canción del Jinete:

En la luna negra
de los bandoleros,
cantan las espuelas.

Caballito negro.
¿Dónde llevas tu jinete muerto?

...Las duras espuelas
del bandido inmóvil
que perdió las riendas.

Caballito frío.
¡Qué perfume de flor de cuchillo!

En la luna negra
sangraba el costado
de Sierra Morena.

Caballito negro.
¿Dónde llevas tu jinete muerto?

La noche espolea
sus negros ijares
clavándose estrellas.

Caballito frió.
¡Qué perfume de flor de cuchillo!

En la luna negra,
¡un grito! y el cuerno
largo de la hoguera.

Caballito negro.
¿Dónde llevas tu jinete muerto?

Los comentarios de Lucas desarman. 
Dice:
Lo de qué perfume de flor de cuchillo mola, mamá, pero lo del cuchillo más que flor es hoja.



miércoles, 3 de noviembre de 2010



A Lucas le cansan los lugares y las explicaciones. Ha cambiado la forma del mensaje. Yo misma ya no leería este libro de Verne.

miércoles, 20 de octubre de 2010

Divorcio y piratas



Para una madre separada, es bastante difícil mantener la tensión narrativa. Justo cuando el detective Fix sube a bordo del Mongolia, donde viaja Fogg, para intentar detenerlo, mi hijo pasa una semana en casa de su padre.


Recuerdo que, cuando nos separamos, Lucas era muy pequeño, tenía poco más de tres. Entonces yo le enseñé la primera estrofa de la Canción del Pirata de Espronceda, aprovechando que en el colegio le pedían que llevara algo relacionado con la piratería (la profesora no entendió la estrofa como tal, pero ése es otro tema). Entonces, el niño debió de recitárselo a su padre, porque volvió de la casa paterna con la segunda estrofa aprendida. Yo se lo mandé con la tercera...
Así, por el pique entre nosotros, llegó a saberse algunas más que yo.


Quizás sea una buena idea enviarle a mi ex marido un ejemplar de La vuelta al mundo en 80 días.



lunes, 27 de septiembre de 2010

la ruta





No recordaba, claro, la ruta seguida por Fogg para dar su vuelta al mundo:

De Londres a Suez por el Mont-Cenis y Brindisi, en ferrocarril y barco.
De Suez a Bombay, en barco.
De Bombay a Calcuta, en ferrocarril.
De Calcuta a Hong-Kong, en barco.
De Hong-Kong a Yokohama, en barco.
De Yokohama a San Francisco, en barco.
De San Francisco a Nueva York, en ferrocarril.
De Nueva York a Londres, en barco y ferrocarril.

A nosotros nos hacía gracia pasar por Moscú, pero no queríamos perdernos la India. A Lucas, además, le parece fatal no pisar ni África ni Sudamérica.

En cuanto al tal Fogg, el chaval lo encuentra un pesado de tomo y lomo. Él es más de Passepartout, claro.
A mí me hace gracia cómo Verne define a la pareja por los labios: Phileas Fogg, boca fina y Passepartout, labio grueso.

lunes, 13 de septiembre de 2010

Deserciones




Cuesta arrastrar a un niño actual hacia ciertos textos de entonces. 
Hace algo más de una semana, antes de arrancar esta vuelta nuestra, tuvimos que abandonar la lectura de Tom Sawyer. No por exigencias de Lucas, sino por hartazgo de la lectora, yo. Revisité una edición original, por si se trataba de la traducción, pero no. Son el lenguaje, el ritmo y la sintaxis. Han cambiado tanto. 


Ahora se nos  hace necesario de nuevo el esfuerzo primero para enfrentar una historia dilatada, la de Verne: los prolegómenos, los datos que faciliten, algunas certezas, otras trampas... 


Es la ley de la sintaxis cinematográfica.



sábado, 11 de septiembre de 2010

Principio del principio


11 de septiembre de 2010


Ayer fuimos a comprar un ejemplar de La vuelta al mundo en 80 días. En casa ya teníamos uno, procedente de una colección que distribuyó El País, pero nos pareció que ese primer acto de ir a comprarlo era necesario. Fuimos a la librería La Central del Raval, porque queda en la plaza de columpios donde acudimos después del colegio, y porque casi todos los libros los compramos allí. Nosotros la llamamos la plaza de Calvo, porque es donde nos solemos encontrar con Javier Calvo y su mujer Mara y sus hijos Judit y Didac.
Esta mañana, con el desayuno, Lucas y yo, Cristina, hemos empezado a leer el primer capítulo. Ya sólo el título -En el que Phileas Fogg y Passepertout se aceptan recíprocamente el uno como amo y el otro como criado, en la edición de EDEBÉ traducida por Manuel Quinto- ha despertado en Lucas serios recelos.
--¿Cómo que amo y criado? ¿Por qué Passepartout es criado?
--Bueno, así funcionaban las cosas en 1870, cariño.
--Muy listo me parece a mí ese Phileas. Pobre Passepartout.
--Lucas, ése era su trabajo, y bien mirado no me parece tan mal trabajo. En una casa, a cubierto, bien alimentado... En peores condiciones trabajaban muchos otros.
--No, mamá. No eran criados.
--¿Qué preferirías tú, ser minero semanas y semanas en el fondo de una mina infecta por cuatro perras o el criado de Fogg?
--Pues minero, claro.


Después han venido las dudas sobre el origen de la fortuna de Fogg. Lucas no se fía un pelo.

jueves, 9 de septiembre de 2010

Empieza la aventura





6 de septiembre de 2010

Hoy hemos tenido una idea. Daremos la vuelta al mundo. Hemos empezado a ahorrar: 4 euros. Cada día pondremos 1 euro por persona: por edad, Raúl, Cristina, Lucas y Pepa. El que no llegue será cubierto por los demás.

Partiremos dentro de diez años, más exactamente el 23 de octubre de 2020, el mismo día que Lucas cumpla 18 años. Para entonces hemos calculado que habremos reunido 16.480 euros.

Invitaremos a Marina, pero creemos que tendrá sus asuntos.

Empieza nuestra aventura.