No recordaba, claro, la ruta seguida por Fogg para dar su vuelta al mundo:
De Londres a Suez por el Mont-Cenis y Brindisi, en ferrocarril y barco.
De Suez a Bombay, en barco.
De Bombay a Calcuta, en ferrocarril.
De Calcuta a Hong-Kong, en barco.
De Hong-Kong a Yokohama, en barco.
De Yokohama a San Francisco, en barco.
De San Francisco a Nueva York, en ferrocarril.
De Nueva York a Londres, en barco y ferrocarril.
A nosotros nos hacía gracia pasar por Moscú, pero no queríamos perdernos la India. A Lucas, además, le parece fatal no pisar ni África ni Sudamérica.
En cuanto al tal Fogg, el chaval lo encuentra un pesado de tomo y lomo. Él es más de Passepartout, claro.
A mí me hace gracia cómo Verne define a la pareja por los labios: Phileas Fogg, boca fina y Passepartout, labio grueso.
No hay comentarios:
Publicar un comentario